Me marcho de viaje a VIENA en 2023
Hablemos un poco sobre una de las capitales más antiguas de Europa y con un patrimonio cultural que asombra a propios y a viajeros.
Viena ha sido cumbre de de la música durante el siglo XIX y capital del debate político y de la filosofía durante todo el siglo XX. Gracias, a estos siglos Viena fue residencia de muchos personajes que han pasado a la historia como Amadeus Mozart, Johann Strauss, Karla Popper, Sigmund Freud,o Viktor Kaplan entre otros.
Pero no todo son su comunidad de intelectuales, músicos o filósofos. Viena fue ciudad de emperadores, y sus palacios, catedrales e iglesias son joyas arquitectónicas que hacen que esta ciudad sea una de las más bonitas de Europa.
Su centro histórico fue declarado por la UNESCO como patrimonio de la humanidad y solo el año pasado ya recibió unos 13 millones de viajeros.
¿Así que te animas a hacer este viaje con nosotros?
¿Qué es lo que vas a encontrar en este artículo?
Se trata sin lugar a dudas de la zona más cara donde dormir en Viena, aunque también la más cómoda, no en vano, estamos hablando del casco antiguo de la ciudad. El precio medio por noche en un hotel del centro suele ser alrededor de los 100€, aunque con antelación también podéis encontrar hoteles rebajados.
En este distrito se encuentran gran parte de los atractivos turísticos de la ciudad. En ella está la Catedral, la Ópera, el Palacio de los Habsburgo, el Albertina, la Biblioteca Nacional, el Ayuntamiento o los museos de Historia del Arte y de Historia Natural por nombrar algunos.
En lo que se refiere a restaurantes y tiendas hay restaurantes de comida rápida como McDonalds o restaurantes de lujo y con más clase.
Este distrito cuenta con docenas de calles dedicadas exclusivamente al tráfico peatonal, entre ellas la Kärntnerstrasse, y la lujosa Graben. Es una zona eminentemente comercial que se caracteriza por sus edificios elegantes, su pulcritud, y su seguridad.
Si no queréis estar en el centro, otra buena zona para alojaros es en Leopoldstadt, una zona contigua al distrito 1, al que incluso se puede llegar a pie, y en el que encontraremos una media de precio de los hoteles más accesible que la del centro, además cuenta con calles mucho más tranquilas, aunque no por eso deja de tener interesantes atractivos turísticos.
Leopoldstadt está bien comunicada por metro y desde las zonas cercanas al canal tardas 10 minutos en llegar a la Catedral a pie. Tan solo tienes que cruzar alguno de los puentes que la conectan con el centro. Además la parada del autobús del aeropuerto para en Morzinplatz, situada en la orilla del canal en el lado de la Innere Stadt.
En esta zona se encuentra el Parque Prater, y se caracteriza por sus amplias zonas verdes.
Leopoldstadt es hoy en día una zona en pleno proceso de remodelación para convertirse en un barrio muy cotizado por jóvenes profesionales y jóvenes creativos. La constante apertura de cafeterías y restaurantes, y el dinamismo del barrio lo han convertido en una de las zonas más deseables de Viena para vivir.
Wieden, junto a Mariahilf y Neubau, es uno de los favoritos para dormir en Viena. Bordea una zona del casco antiguo muy cercana a los grandes atractivos de la ciudad como la Ópera, el Barrio de los Museos o el Hofburg.
La ubicación es bastante buena: muy cerca del Palacio de Belvedere, uno de los principales atractivos turísticos y a unos 20 minutos a pie del centro de Viena. Además tenéis muy cerca la Wien Hauptbanhof (estación central), por lo que es una zona muy bien comunicada.
La calle Kärnerstrasse, el principal bulevar del centro de la ciudad, se convierte en la calle Wiedner-Hauptstrasse al entrar en este barrio, y la estación de ferrocarril Südbahnhof, una de las dos principales, se encuentra en su extremo sur. Este distrito es una de las mejores opciones para hospedarse en Viena.
En esta zona el alojamiento te puede salir por debajo de lo que te costaría pagar en un apartamento o en una pensión en el centro vienés.
Landstrasse está situado al sudeste del centro histórico. Se caracteriza por la elegancia de la arquitectura de sus edificios. En él se encuentran atractivos turísticos como el Palacio Belvedere, el palacio Schwarzenberg, las Hundertwasserhaus, y el Konzerthaus, además del conocido como el barrio diplomático, una pequeña zona que acoge varias embajadas.
Varias embajadas se encuentran en una pequeña sección de Landstrasse conocida como el barrio diplomático de Viena. La estación de ferrocarril Wien Mitte y la terminal aérea de la ciudad también están aquí. Éste es uno de los distritos más prácticos para alojarse en Viena.
En este distrito podréis ver más del encanto imperial de Viena. Las calles están salpicadas de iglesias, monumentos y palacios, como el gran palacio de Schwarzenberg y el Konzerthaus (casa de concierto).
Lo malo de esta zona es que no hay tanta oferta como en las otras zonas, asi que hay que buscar bien y con anticipación.
Llegar a Viena en avión suele ser la opción mas utilizada. Llegar a Viena en avión es algo bastante fácil ya que Viena cuenta hasta con su propia aerolínea (Austrian Airlines) la cual tiene vuelos desde diferentes partes del mundo. Si viajas a Viena en avión llegaras al aeropuerto de Schwechat el cual es el aeropuerto internacional de Viena.
Nuestra recomendación es que uséis un buen comparador de vuelos para localizar el vuelo que mejor se ajuste a vuestras necesidades, aquí os dejamos uno para facilitaros el trabajo de andar buscando.
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El aeropuerto de Viena es uno de los mejores comunicados de Europa y presenta muchísimas opciones para ir a la ciudad. Según presupuesto contamos con 4 medios de transporte:
CAT o City Airport Train: El CAT es el tren que va desde el aeropuerto a la ciudad, parada Landstrasse – Wien Mitte, desde donde puedes coger un metro. El trayecto son unos 16 minutos y no hace paradas, además pasa cada 30 minutos y el precio es bastante económico.
El bus: El autobús del aeropuerto está genial ya que, el trayecto dura unos 20 minutos y hace paradas en muchos puntos de la ciudad.
El S-Bahn: Este medio lo usan muchos turistas. Es un tren de cercanías que para en varios puntos de Viena. Te deja en la estación de Landstrasse pero lo bueno es que el billete incluye metro.
Taxi: es el medio más caro para ir del aeropuerto a la ciudad. El trayecto suele durar unos 30 minutos aproximadamente.
También es posible llegar a Viena en Ferrocarril, claro, desde cualquier parte que sea Europa, Ya que Viena Cuenta con líneas férreas que la conectan con muchas de las ciudades europeas. Los viajes férreos más frecuentes y más Habituales en Viena son los que llegan desde Venecia y Paris.
También suele ser una buena opción, ya que Viena cuenta con redes de carreteras en muy buenas condiciones que la unen con diferentes ciudades como Bratislava, Praga, Budapest, Zagreb, Múnich, Salzburgo, etc.
Es posible llegar a Viena en Barco, pero solo en los meses de Abril a Octubre y llegar por el Danubio desde Bratislava, Wachau o Budapest, desembarcar en Danoudampfschillsgesellschft. Existen muchas compañías de cruceros que proponen viajes a Viena.
Si viajas a Viena es recomendable que para que el transporte en la ciudad te salga más económico, adquieras la Vienna Pass, la cual también te servirá para entrar a Museos y otros sitios turísticos. La podrás adquirir en hoteles y puestos de información turística y tiene una validez de 4 días.
Moverse en Viena suele ser bastante sencillo, ya que Viena cuenta con muy buen transporte público, en buenas condiciones, con horarios desde la 5 am, hasta las 12 am.
Como en todas las ciudades te puedes mover en bus, taxi, tranvía o a pie, pero uno de los transportes que más destaca en Viena es su metro o Ubhan-Sbahn. Dentro de cada estación puedes conseguir un mapa completo de las líneas para moverte por la ciudad.
En todas las estaciones de metro existen unas máquinas que suelen ser rojas y se pueden comprar los billetes, además se puede seleccionar el idioma por lo que, es mucho más fácil no equivocarse. Tenéis billetes de todo tipo: individuales, de 24h, de 48, de 72h y hasta semanal.
Estos billetes sirven para los buses, para el tram y para los metros por lo que, es la mejor opción si vas a visitar Viena y quieres ir a muchos sitios.
Una vez los compras tienes que ir a validarlo a otras máquinas dentro de las estaciones, que suelen ser amarillas o azules. Recordarlo ya que, si un revisor os pilla con el tiquet sin validar son unos 100€ la multa que os pueden poner y los austriacos se lo toman muy enserio.
Lo único que hay que tener muy en cuenta, que los billetes que van por horas, por ejemplo el de 24h empieza a contar desde la hora que lo validas, así que si lo validaste a las 11 am valdrá hasta las 11 am del día siguiente, y no todo el día siguiente como mucha gente se piensa.
Viena posee las líneas de Tranvías más largas del mundo. Los tranvías son rojos y blancos, y estos han venido desapareciendo, pero aun son bastante utilizados, sobretodos por los turistas. Se dice que las líneas 1 y 2 son las más utilizadas por los turistas.
Es fácil moverse en Viena por Autobús, pero no es recomendable, no por mala calidad del servicio, sino que los tranvías y el metro cubre con muchos rincones que cubren los autobuses y el precio y la calidad muchas veces sueles ser mejor. Te pueden resultar bastante útiles los autobuses nocturnos, aquellos que circulan desde las 12:30 am hasta las 5 am. Horario en el cual no circula el metro ni el tranvía.
De todas formas, si lo que os interesa es moveros y visitar los alrededores, alquilar un coche, os dejamos a continuación un comparador de alquiler de coches para que veais la mejor oferta en la ciudad.
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El nombre de la ciudad de Viena es un derivado de nombres anteriores que al final hacían referencia al nombre de origen celta con el que la bautizaron los romanos: Vindobona, que significa ciudad blanca.
La ciudad es fundada gracias a un gran campamento romano que estaba ubicado en lo que es Viena, el campamento fue puesto estratégicamente por los romanos, los cuales intentaban controlar la región de Panonio, luego fue utilizado como punto de defensa militar y así duro por varios siglos.
En la edad media Viena sufre algunas invasiones Bárbaras, pero es recuperado su poder por el gran Carlomagno, después fue una ciudad totalmente comprometida con la guerra de las cruzadas y por ello fue almacenamiento de víveres y armas que se utilizaban para la guerra.
Después de la guerra religiosa, Viena no tuvo mucha paz ya que después vinieron las guerras napoleónicas y diferentes conflictos que se generaban por el interés de conquista de algunos imperios como el otomano y el turco. En 1938 sufrió las invasiones nazis por parte del Furher y en 1955 cuando Austria recupera su independencia Viena pasa a ser su capital.
Viena está dividida por distritos como París, va desde el distrito 1 al 23, siendo el 1 lo que se considera el casco antiguo de la ciudad. No te vas a equivocar ya que, siempre sale en los mapas rodeado de un anillo amarillo que se le llama Gürtel o Ring.
Una de las mejores propuestas para conocer la ciudad de Viena son los famosos free tours.
Guruwalk, comunidad de guias locales que ofrecen “free tours” en sus ciudades
Los guías de free tours suelen ser bastante amenos y divertidos ya que, se juegan que sus propinas sean más o menos altas.Lo bueno de estos, es que pagas según tu experiencia y siempre cuando acaba la visita.
De esta manera, puedes conocer la ciudad y la propina que se suele pagar por un free tour de 2h aproximadamente es de unos 10-15€ por persona.
Os recomendamos Guruwalk, plataforma de free tours internacional donde podéis ver valoraciones de viajeros que ya han hecho el free tour y así elegir los mejores free tours para esta bonita ciudad.
Stadpark: Bonito parque en medio de la ciudad con un estilo inglés y donde se puede encontrar la estatua dorada de Strauss, con la que se le rinde homenaje al compositor austriaco. Además este parque data de 1862, se le reconoce como uno de los parques más antiguos de la ciudad.
Heladería Eis Gleissler: Es de las primera heladerías “bio” de la ciudad y sus helados son artesanales. Las colas son larguísimas pero merece la pena comerse un buen helado de Eis Gleissler. Situada al lado de la catedral, pero no por ello es una heladería cara, de hecho es de las más baratas de la ciudad y tiene un gran surtido de sabores.
25 Hours Hotel: Es uno de los hoteles de la ciudad de Viena, pero lo famoso es el “roof top” o terraza en su último piso, donde puedes tomarte algo, relajarte y disfrutar de las maravillosas vistas de la capital austriaca.
Donaukanal: Paseo por el canal, viendo los graffitis de sus calles que además son legales y toda una obra de arte. Al canal se puede llegar desde miles de puntos diferentes, pero en verano cerca de la plaza Schwedenplatz puedes disfrutar de sus terrazas y su música. Os recomendamos uno de los free tours más famosos de Viena, donde te enseñan todo el arte graffitero de la ciudad.
La cultura gastronómica de Austria es bastante amplia pero queremos deciros los platos que tenéis que probar antes de abandonar Viena.
Schnitzel: Este plato es super típico en Austria, consiste en un pollo empanado pero macerado con muchas especias y es increíble. Uno de los mejores restaurantes donde hacen schnitzel es la “plachutta”. Las raciones son gigantes, así que lo puedes pedir hasta para compartir, además siempre lo acompañan con la karttofelnsalat o ensalada de patata hervida.
Würlst: Este plato viene importado de Alemania, aunque en Viena las hacen buenísimas. Estas salchichas se suelen comer en perrito caliente y os aconsejamos que las pidáis por los puestos que se encuentran en la calle ya que, son los que mejor lo hacen.
Tafelspitz: Es un plato muy típico austriaco no tan conocido como el Schnitzel, aunque riquísimo. Se trata de una olla donde hacen una sopa con carne y verduras. Te lo sirven todo junto pero se suele comer por separado, una especie de cocido contundente. Para los meses de frío es genial, te calienta de arriba a bajo.
La tarta Sacher: Si el Schnitzel es famoso, esta tarta ya es internacional. Es una tarta de chocolate increíble que esconde una capa de mermelada en su interior y que además te la sirven rociada de nata montada. No hay palabras para describir su sabor.
Krapfen: Otro poste típico y auténtico. Un bollo tipo donuts pero sin agujero y que va relleno también de mermelada, buenísimo.