Ha llegado el momento en el que es necesaria una escapada que aleje del estrés y obligaciones diarias. Puede que la elección del destino perfecto pueda suponer un quebradero de cabeza, pero si se está abierto a recomendaciones, a lo largo de este artículo se descubrirá una lugar perfecto en el que desconectar, Mallorca, y, más concretamente, su capital, Palma.
Palma de Mallorca es conocida por ser una de las perlas del Mediterráneo. De hecho, está considerada como uno de los mejores lugares del mundo en el que vivir. Tal vez sea por sus más de 300 días soleados a lo largo del año, por su ambiente, por su historia y monumentos o por su enorme oferta gastronómica. Sea por lo que sea, está claro que es un destino muy reclamado, recibiendo decenas de miles de visitantes cada año.
Esta ciudad fundada por los romanos encierra bellos tesoros en cada rincón para delicia del viajero, que necesitará más de un día para disfrutar de todos y cada uno de ellos.
¿Qué ver en Palma de Mallorca?
Tal y como se indicaba anteriormente, en Palma de Mallorca cada metro es único y diferente, pero para poder aprovechar la estancia al máximo, a continuación, se indican todos aquellos puntos de obligada visita de esta hermosa capital de las Islas Baleares.
La ruta que se muestra a continuación puede hacerse de forma independiente, pero no está de más disponer de un guía especializado que proporcione más información y detalles interesantes sobre lo visitado, como los que pone a disposición de sus clientes webs como la de Mallorca Free Tour.com.
La catedral de Palma
Una buena forma de comenzar a conocer más a fondo la ciudad es visitando la Catedral de Palma Mallorca, también conocida como La Seu, un templo de estilo gótico localizado en pleno casco histórico, impresionante tanto por su diseño exterior como por el interior, en el que se disfrutan de unos ventanales y rosetones que aportan un juego de luz único, todo cargado de historia. La catedral dispone de un gran lago, el Parque del Mar, que crea una imagen idílica que transporta a tiempos pasados.
Palacio Real de la Almudaina
A pocos metros, el turista se topará con el Palacio Real de la Almudaina, uno de los edificios históricos más bellos de Palma. En la arquitectura del mismo se puede observar a simple vista el legado que han ido dejando las distintas culturas que han pasado por la ciudad, tanto en su fachada como en su interior. Este edificio se usa actualmente como residencia oficial de la familia real en sus visitas.
Los patios
También en el centro de la ciudad el viajero encontrará en cualquier rincón los conocidos patios mallorquines, que transmiten calma y paz a todo el que se adentra en su magia. Son bastante sencillos y de líneas simples, pero realmente inspiradores, haciendo que el tiempo se pare en ellos.
Castillo de Bellver
Por último, pero no menos importante, en un punto más alejado del centro, el visitante no puede perderse el Castillo de Bellver, localizado en una colina a más de 100 metros de altura sobre el nivel del mar. Este castillo es una fortificación que ofrece unas vistas imponentes de toda la ciudad, con una puesta de sol única que quedará grabada en su retina. Si lo desea, el turista podrá visitar su interior; a día de hoy alberga el Museo de Historia.
Más planes en Palma de Mallorca
Palma es perfecta para visitar en cualquier época del año y las opciones que ofrece a sus visitantes son muy diversas y variopintas. Presenta una opción perfecta para cada perfil.
En el aspecto gastronómico la oferta de la ciudad es impresionante, con restaurantes, cafeterías y locales de ocio de todo tipo en los que se viven experiencias excepcionales gracias a su ambiente selecto, la calidad de sus productos y a un entorno con unas vistas privilegiadas de esta perla del mediterráneo.La cultura también juega un papel imprescindible en la personalidad tan característica de la ciudad Palma de Mallorca. Sus museos y galerías de arte son muy interesantes, destacando Es Baluard, el Museo de Arte Moderno y Contemporáneo.
